La esencia del liderazgo es gestionar la cultura, y la esencia de la cultura es permitir que el liderazgo alcance todo su potencial. Sabemos que los actuales modelos de cultura corporativa están experimentando un punto de inflexión. Por un lado, las tecnologías disruptivas están acelerando el cambio en los hábitos de consumo y las oportunidades de negocio, exigiendo, al mismo tiempo, una mayor agilidad en el "Go to market". Esto requiere un tipo de talento ágil que debe adaptar su enfoque para trabajar de forma diferente, adoptando nuevos métodos, tecnologías y enfoques que se alineen con las demandas cambiantes de sus funciones y de la organización. Pero este talento, a su vez, está demandando mayor libertad, flexibilidad y autonomía para trabajar dónde y cuándo sea más productivo, poniendo especial interés en la búsqueda del bienestar y en encontrar un propósito genuino que dé sentido y sostenibilidad a su compromiso.
Kingsley Gate ha realizado un estudio en el que han participado 538 directivos de Argentina, Brasil, Chile, Colombia, España, México, Perú, EE.UU. y Venezuela, para conocer el impacto del proceso de transformación de los modelos de negocio en el estilo de liderazgo, la cultura de la empresa y la Propuesta de Valor del Talento.
Este estudio de investigación sugiere que la cultura y el liderazgo son factores críticos para el éxito de los proyectos de transformación. Interactúan entre sí, dando lugar a una nueva Propuesta de Valor para el Talento. Esta propuesta es vital para atraer, retener y comprometer a personas con talento en el panorama competitivo actual. Al dar prioridad a la innovación, crear oportunidades y aplicar estrategias eficientes, las organizaciones pueden afrontar con eficacia los retos de la escasez de talento y mantener un alto rendimiento.
